jueves, 30 de diciembre de 2010

Enfadarse


En estos días en los que la gente se junta con sus familias, amigos y demás, acaban surgiendo tiranteces y pueden surgir enfados.

Siempre he mantenido que aquel que se enfada tiene dos problemas: Enfadarse y desenfadarse.

La verdad es que si hay algo que verdaderamente me caracteriza es que soy un tío consecuente. Mantengo las cosas que digo hasta extremos inimaginables y, por supuesto, jamás pido algo que yo no doy. Por desgracia la gente no suele ser así, y es algo que en ocasiones olvido y que me produce cierta desazón, pero hay que aceptar que cada uno es como es.

Esa es mi forma de ser y de pensar, por ello no me enfado con la gente, creo que no merece la pena, que no me reporta nada a mí, ni a ellos. Un enfado no repara un desaire, una queja no cambia una actitud, si no te gusta lo que ves, no lo mires, si no te gusta cómo te tratan, no te acerques a ellos.

Supongo que como casi siempre, es más fácil decirlo que hacerlo

Equilibrio energético


Hoy, mientras charlaba con una amiga, me comentaba que estaba deseando tener hijos. Mi replica ha sido que a mí también me gustaría, lo de formar una familia es algo que siempre me ha apetecido. Siempre lo he tenido en la cabeza, es más, si hubiese sido padre con 22 o 23 años (un padre joven) creo que habría sido bastante feliz.

Ahora han pasado unos cuantos años, pero sigue sin disgustarme para nada la idea de tener críos. Lo que me da una pereza enorme es tener pareja, o más que tenerla, buscarla.

Mis amigos son de la opinión de que no tengo novia porque no quiero, y no carecen de razón. No es que sea George Cloney, ni nada similar, pero vamos, tampoco soy lo peor que te puedas echar a la cara. Sencillamente es que me da pereza todo el ritual del cortejo, la cantidad de tiempo y de energía que hay que gastar en conquistar y mantener el interés de la mujer hacen que ni siquiera me moleste en intentarlo. Todo esto unido a que soy incapaz de comprenderlas... pues hace que me esté quedando para vestir santos, jejejejejeje.

Además, tendría que añadir que las mujeres me dan cierto "miedo". Nunca se me han dado bien y el hecho de ser incapaz de comprenderlas, como comentaba anteriormente, tampoco ayuda, por lo que acercarme a ellas nunca me ha resultado fácil.

En fin, un día llegará alguna que merezca toda esa energía, o al menos eso me gustaría creer, pero lo cierto es que con los años, cada vez lo pienso menos.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Recibimiento


Ayer cuando llegué al aeropuerto, en la puerta de salida había gente con pancartas para recibir a sus seres queridos. Aunque pueda parecer una chorrada, es algo que me haría una ilusión tremenda.

Cojo tantos aviones al cabo del año... siempre se repite lo mismo, ir solo, volar solo y llegar solo. En contadas ocasiones se ha acercado algún amigo a recogerme, y siempre ha sido porque yo se lo he pedido al llegar muy cargado de algún viaje, pero eso de que te esperen, pancarta en mano como si fueras la selección española...

En fin, ya ando por España. Intentaremos ver un poco a la familia y a los amigos, pero vamos, será algo tranquilo, estas fiestas me gustan poco.

En cualquier caso, espero que los demás paséis unas excelentes navidades y que disfrutéis mucho de vuestros seres queridos.

¡¡Feliz Navidad a todos!!

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Vuelta a casa por Navidad


Pues como el turrón, que siempre vuelve a casa por Navidad, yo no puedo ser menos, así que bajaré a España a pasar "estas fechas tan señaladas" con la familia y tal.

La verdad es que a mí ni fu ni fa, para qué os voy a engañar. No siento un gran apego por la familia y creo que la mayor parte de amigos y conocidos estarán fuera, así que, este viaje no es que sea particularmente deseado. Me hubiese apetecido mucho más irme a Tailandia, sin ir más lejos, jejejejejeje, unos amigos pasarán allí la nochevieja y promete ser brutal la cosa. Pero me temo que era demasiada pasta, prefiero invertir ese dinero en otros viajes (muchos otros).

Sinceramente, me paro a pensarlo y en este momento de mi vida lo que más me atrae son los viajes. Mi día a día transcurre entre un viaje y el siguiente, y gracias a eso, pasa enormemente rápido. Unas veces por trabajo, otras por placer, pero de cualquier modo lo que me apetece es viajar. Supongo que viajar es el modo que tengo para evadirme de la realidad.

martes, 21 de diciembre de 2010

De las extraños compañeros de viaje


A medida que vamos avanzando en este largo camino (o corto, según se mire) que es la vida, van apareciendo nuevos compañeros de viaje. Algunos caminan con nosotros tan solo unos pasos, otros nos acompañarán ciertas etapas, y puede que con suerte, encontremos alguno que nos acompañe durante gran parte del recorrido.

Todos ellos tienen la misma importancia, pues todos ellos cumplen su función y nos aportan algo. Pese a esto, hay ocasiones en las que nos cerramos, o más bien les cerramos las puertas, para que no se acerquen a nosotros. No les dejamos caminar a nuestro lado, ya sea un metro o una milla, simplemente los alejamos.

Puede que esto sea un error, o puede que no, quién sabe, el caso es que hay gente que tiene fuerza suficiente para quedarse, que aguantan el chaparrón y nos acaban demostrando que nos equivocamos. Otros en cambio se marchan y les perdemos, nos perdemos aquello que tenían para aportarnos, al igual que ellos se pierden lo que nosotros teníamos que aportarles a ellos...

Por desgracia creo que esto último es lo que más sucede en el mundo actual, no tenemos tiempo para nada, ni tan siquiera para conocer gente que verdaderamente tenía cosas que aportarnos.

sábado, 18 de diciembre de 2010

El día en que conquisté la Gran Muralla


Y una vez más estoy de regreso tras un largo viaje. ¿Qué puedo decir de este viaje?... pues que la experiencia ha sido increíble, toda una experiencia vital.

Vuelvo con mucha energía y con unas ganas locas de comerme el mundo.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Quédate con lo malo


Llevo una temporada un tanto negativo, es cierto que las cosas no me han ido todo lo bien que uno desearía, pero bueno, eso tampoco es escusa. Todos tenemos momentos mejores y peores, el mío... pues no hará historia, pero tampoco ha sido un desastre completo vamos, también ha tenido sus cositas buenas, si se sabe mirar con la perspectiva adecuada.

Estoy cansado de venir con "lloros", mi vida es buena, tengo mucho más de lo que necesito para ser feliz y pardiez que lo voy a ser, jejejejejeje.

Si el mundo no me da lo que deseo, pues lo cambio y santas pascuas.

Para empezar me voy del continente una temporada, China es tan buen sitio como cualquier otro para encontrarse a uno mismo, o para perderse, según se mire. Por mi parte no sé lo que haré, si perderme o encontrarme, lo que sí estoy seguro que haré será disfrutar al máximo la experiencia.