lunes, 22 de octubre de 2012

El oráculo de Delfos

Siempre que tenemos una duda, ya sea mínima o de gran importancia, nos dirigimos al Oráculo y se la formulamos. ¿Dónde puedo comprar determinado modelo de televisión? ¿Cuál es la capital de Albania? ¿Me puedo desgravar el dentista de mi gato? El Oráculo responde todo.

No hay día que no acudamos a su encuentro en busca de consejo, sus respuestas nos guían en el quehacer diario. ¿Qué sería de nosotros sin él?

¿Qué sería de nosotros sin google?

lunes, 15 de octubre de 2012

La mentira como un bien mayor



He vuelto a mentir.

Resulta curioso, pero he llegado a la conclusión de que la mentira hace más bien que la verdad (o que el silencio).

No se trata de que ahora me haya vuelto un mentiroso de cabo a rabo, simplemente, de un tiempo a esta parte he vuelto a decir mentiras, algo que hacía mucho, muchísimo, que no hacía. ¿En qué consisten esas mentiras? Pues bien, yo diría que son mentiras piadosas que hacen más fácil la vida de la gente que me rodea.

Los que leáis el blog desde hace tiempo (si es que algo así existe) sabrán que tengo una particular forma de ver la vida, cercana al budismo en ciertos aspectos y a otras doctrinas en otros, pero mía al fin y al cabo. Dicha forma de ser hace que sentimientos como la envidia o los celos hace tiempo que desaparecieron de mi persona, pero también otros como el apego o la añoranza.

Para la mayoría de la gente ésto es algo totalmente inconcebible. No pueden comprender que una persona no eche de menos las personas que deja atrás si las apreciaba de verdad. Si tú quieres a alguien tienes que echarle de menos, es su credo. Pero, me temo que por desgracia, no es el mío.

Por eso decidí mentir en éste aspecto. Creo que no hace daño a nadie, puesto que realmente aprecio a la gente que dejo atrás, y si de ese modo se sienten más queridos, pues fenomenal.

En el resto de aspectos prefiero seguir diciendo la verdad.

martes, 9 de octubre de 2012

Y al final lo que encuentras...

Es lo mismo que dejaste, lo cual en ciertos aspectos no está nada mal, pero en otros no deja de ser inquietante.

Sí, por si alguno tiene dudas, he vuelto al país que me vio nacer.