lunes, 18 de julio de 2011

Bodas y novias


Este fin de semana asistí a la boda de unos amigos. Lo cierto es que era una boda que me hacía especialmente ilusión y a la que fui con muchas ganas, no era de esas a las que uno va por cumplir, no, esta era especial. Especial por la relación que tengo con los novios, con ambos, tanto con ella como con él. Además, compartimos un amplio grupo de amigos, por lo que era una excelente oportunidad para reencontrarme con unos cuantos de ellos a los que hacía bastante (mucho en realidad) tiempo que no veía.

La cosa fue fenomenal, una ceremonia muy bonita y una cena estupenda en la que obsequiamos a los novios con alguna sorpresa, fue una locura la que montamos ahí, pero que salió estupendamente.

Y con esto llegamos a la parte interesante, o, al menos, a la que venía yo a comentar, puesto que me pareció bastante destacable, el baile.

Antes de continuar permitirme un breve inciso sobre los bailes. Resulta que a mí siempre me ha gustado bailar, o más bien hacer el tonto cuando era más joven, y ahora... pues hacer como que bailo, hasta conseguirlo algunas veces. Tengo un buen sentido del ritmo (por eso aprendí a tocar el piano, o tal vez porque aprendí a tocar el piano ahora tengo sentido del ritmo, no lo sé), y una coordinación más que excelente (un talento natural potenciado por la práctica de las artes marciales). En el gimnasio donde iba daban clases de salsa los sábados, así que aprendí salsa, bachata y merengue (aunque me temo que recuerdo lo justo y casi todo de salsa). Vamos, que estoy hecho un Chayanne en potencia (a todo esto hay que sumarle que soy capaz de hacer todas las historias que hace Shakira, los movimientos de cadera, torso y demás).

Como decía, llegó la hora del baile y como es tradición en todas las bodas, con el baile llegó la barra libre. La división estaba clara, todos los chicos a la barra libre y las chicas a la pista de baile, bueno, las chicas y yo (porque no bebo). Y allí es donde sucedieron los hechos.

Aquí me detengo una vez más con otro inciso. Hay que decir (aunque quede un poco mal que sea yo quién lo haga) que estaba guapo, muy guapo, las cosas como son. Iba con un traje negro, camisa negra y corbata marfil o así (no era blanca). Por supuesto, con mi 1.95 era el más alto de los allí reunidos con diferencia, así que vamos, se me veía bien.

Yo me encontraba bailando con mi grupo de amigas, alguna conocida y la novia de uno de mis amigos (que era la primera vez que veía y cuyo nombre, las cosas como son, no recuerdo, así que la llamaré María). Pues bien, además de que se me acercaron varios grupos de chicos para insistirme en que bailase con sus amigas solteras y de bailar con la hermana de la novia y la novia, la mayor parte del tiempo estuve bailando con las chicas de mi grupo.

De las chicas de mi grupo, la que más juego daba era María (a la que repito, no conocía de antes) por lo que al principio bailamos bastante, temas en plan salsa y cositas así. A medida que la noche avanzaba las canciones se volvieron algo "más calientes", yo comencé con los movimientos un tanto sugerentes (pero al aire), yo iba y venía, un poco a mi aire, pero María empezó a buscarme y acabó haciéndome, lo que un amigo denomina un "culoenpolla" (creo que no hace falta explicar qué es). Para mí aquello era sólo un baile, pero vi la cara de mi colega y era obvio que le había molestado, y bastante, así que intenté poner un poco de tierra de por medio, salí fuera a tomar el aire un rato.

FIN DE LA PARTE 1 (CONTINUARÁ)

6 comentarios:

Jenn dijo...

Mmmm, Chayanne... Jajajaja, me gustaría haberlo visto.

No sé lo guapo que estarías, pero el conjunto podemos calificarlo de "rompedor", me gusta mucho como queda un traje negro con camisa negra, y más en 1.95... Aunque yo habría puesto una corbata de un color más fuerte.

Ahora analicemos... La novia de tu amigo, a la cual no conocías, te hizo un "culopolla" o lo que viene siendo que.. "se arrimó a la cebolleta" (siempre me ha hecho gracia lo de cebolleta, no acabo de encontrarle sentido). A mi parecer, la novia de tu amigo es, al menos, un poco zorra (sin acritud eh!). Te acaba de conocer, eres amigo de su novio y ni corta ni perezosa arrima... Yo también me hubiera enfadado.

Continuará?? Lo mal que lo paso con los "Continuará...". Anda, no me hagas esperar mucho...

Besos.

Oscuro dijo...

Ya, yo también tenía en mente un color más fuerte, en concreto una naranja, pero olvidé mi sets de corbatas allende los mares y me tuve que conformar con lo que tenía en la casa.

Tranquila, que no tendrás que esperar demasiado, lo había puesto todo en una entrada, pero me pareció excesivo y por eso lo separé. Además, un poquito de intriga viene fenomenal.

Un beso

Jenn dijo...

Sí, me gusta más el naranja... Te podría haber dejado una azulona que tengo, hubiera quedado muy bien...

Ok, mejor, jajajaja. Mmmm, me siento identificada con eso de que era excesivo para una entrada, ya sabes que soy famosa por mis largos post (por cierto, te espera uno en mi blog...), jajaja. Si, viene bien, pero solo un poquito, ¿eh?

Besos.

Oscuro dijo...

Un azul eléctrico también habría sido la caña.

Ya sabes el dicho Jenn, lo bueno, si breve, dos veces bueno, jejejejeje.

Un beso

Jenn dijo...

Ya le haré una foto a la corbata un día de éstos...

¿Sabes cuál es mi problema? Que soy demasiado descriptiva, que me pongo a escribir y me quedo sola, que me gustar ser tan precisa que no tengo fin...

Besos.

Oscuro dijo...

Pues te tomo la palabra Jenn, ahí tienes mi correo electrónico, me la mandas y si veo una igual la compro y me saco una foto :D

Ya lo he notado ya, jejejejeje.

Un besito