lunes, 25 de abril de 2011

Viajando


Viajando se descubren cosas, se conocen lugares, pero lo que es más importante, te conoces a ti mismo.

Viajando me encuentro, me encuentro y me vuelvo a perder, todo junto, todo a la vez.

Suele suceder con mis viajes algo peculiar, una extraña sensación se apodera de mí. Parece que fue ayer cuando me fui, pero a la vez me parece que fue hace años de aquello. Así de intensos son mis viajes. En ellos quemo cartuchos de vida, este último creo que ha supuesto perder algún año de vida, pero ¿de qué sirve la vida si uno no puede sentirse vivo?

Regreso una vez más, o al menos regresa una pequeña parte de mi, el resto se quedó en el camino. Tal vez lo recupere, tal vez no, pero lo que es seguro es que no será lo mismo que antes.

2 comentarios:

S. dijo...

Cuando viajas nunca eres el mismo.A mi me encanta viajar y lo hago cuando mi economía me lo permite.
Lo último que he descubierto es que viajar te hace más tolerante.
Besitos calvorotas

Oscuro dijo...

Pues no sé hasta qué punto es cierto eso de que te haga más tolerante... creo que con los años me estoy volviendo más cascarrabias, y a su vez, más intolerante, jejejejejejeje, así que con todo lo que viajo... si no viajase sería un ogro, jejejeje.

Un beso adita