Viajando

Viajando se descubren cosas, se conocen lugares, pero lo que es más importante, te conoces a ti mismo.

Viajando me encuentro, me encuentro y me vuelvo a perder, todo junto, todo a la vez.

Suele suceder con mis viajes algo peculiar, una extraña sensación se apodera de mí. Parece que fue ayer cuando me fui, pero a la vez me parece que fue hace años de aquello. Así de intensos son mis viajes. En ellos quemo cartuchos de vida, este último creo que ha supuesto perder algún año de vida, pero ¿de qué sirve la vida si uno no puede sentirse vivo?

Regreso una vez más, o al menos regresa una pequeña parte de mi, el resto se quedó en el camino. Tal vez lo recupere, tal vez no, pero lo que es seguro es que no será lo mismo que antes.

Suenan trompetas

Mi vida transcurre... sin más. No hay grandes sobresaltos, ni pequeños tampoco, simplemente los días pasan y con ellos me doy cuenta de que ya llevo más de medio año fuera.

Parece que fue ayer cuando me fui, pero a la vez parece que han pasado 5 vidas. Me marché con una maleta bajo el brazo, y cuando me largue de aquí, una maleta me llevaré, sigo sin necesitar nada más.

Por todo lo demás... mi oficina se ha vuelto un caos últimamente, hoy un compañero nos ha dicho que se marchaba, se veía venir, porque el hombre estaba "más quemaó que la pipa un indio". A mí, pues me afecta poco laboralmente, supongo que ser el jefe de tu departamento tiene esas cosas, pero bueno, personalmente siento que se marche, porque era un buen hombre, pero a la vez me alegro por él, porque ha tomado la decisión que ha creído mejor.

Suenan trompetas de cambio, por lo pronto, dentro de nada me largaré una temporada de viaje, y eso siempre viene bien.

Elegir un libro por las tapas

No sé si alguien más practica este curioso arte, pero a mí me sucede a menudo, sobre todo cuando recorro los pasillos de una biblioteca, que un libro me llama la atención por su forma.

Me interesa su tamaño, el número de páginas, la editorial, la portada... todo menos el autor y el nombre del mismo, que es precisamente lo que atrae a la mayoría de lectores.

Me gusta eso, que un libro me cautive primero por sus formas, no tiene que ser necesariamente de un modo determinado. Unas veces elijo un libro fino y pequeño, otras uno grande y tosco... un poco "lo que el cuerpo me pida" en ese momento.

El último libro que me "atrajo" fue Seda, de Alessandro Baricco, en concreto la duodécima edición de la editorial Anagrama. Esta editorial me la descubrió una antigua novia y fue un gran descubrimiento.

En cuanto al libro en si, he de decir que me gustó bastante. Más que un libro es un relato, por su brevedad, y más que un relato podríamos llamarlo... un cuento, por su sencillez. Sus 125 páginas lo convierten en el amigo ideal para que te acompañe en una tarde de lluvia junto a la ventana.

La masturbación masculina, nueva entrega

Resulta que mi anterior entrada sobre la masturbación masculina es la tercera más visitada en mi blog. Como parece ser un tema que interesa al personal, pues vamos a por un segundo round.

Por cierto, antes de continuar, si te interesa leer la anterior entrada, AQUÍ puedes encontrarla.

Tras esta pequeña toma de contacto, nos adentraremos un poco en la materia.

Dentro de un mes aproximadamente vienen unos amigos a hacerme una visita por estas frías tierras del norte. Nuestro plan para esos días será un poquito de turismo y un muchito de hacer el golfo por ahí.

Dos de mis tres amigos están casados, pese a ello, vienen con ganas de darlo todo. Aunque vamos, ya me conozco yo "el todo" que daremos, no será ni un 10%, como siempre... Cuando éramos jóvenes teníamos menos arte con las tías que la leche, y ahora... pues puede que estemos peor, si es que eso puede llegar a ser posible.

No sé muy bien cómo surgió la cosa, pero el tema está en que uno de ellos lanzó el desafío de no masturbarse hasta la fecha en cuestión, fue más una broma que otra cosa, pero como yo soy un tipo de palabra, me dispongo a cumplir con el desafío. El mes de abril será un mes de secano.

No es que sea un degenerado que se la esté "pelando" a cada momento, pero dado que no tengo pareja, mis únicos encuentros sexuales se limitan a los contactos con mi mano derecha o mi mano izquierda (ventajas de ser ambidiestro), y estos se producen con cierta regularidad, o se producían más bien.

Así que nada, veremos cómo transcurre este mes de Abril, ¿aguantaré? Puede que acabe subiéndome por las pareces, o puede que tras esto desarrolle una inapetencia sexual, vaya usted a saber...

Sea como fuere, será un experimento interesante.

PD. Increíble el realismo de la muñeca hinchable que ilustra esta entrada, ESTA es la web donde las venden.