Lo bueno de los viajes es que si quieres, y sólo si quieres, puedes conocer a mucha gente interesante. Alguna de esa gente puede que tan solo pase por tu vida como pasa el viento, pero tal vez, otros se queden ahí para siempre.
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8 comentarios:
Eso no sólo ocurre en los viajes; tan sólo nosotros somos quienes decidimos quién entra en nuestras vidas y quién no. Por eso siempre digo que es mejor dejar las puertas abiertas a todo, ya que nunca sabes lo que puedes encontrarte al otro lado, y aunque muchas de las personas que conoceremos a lo largo de nuetra vida, sólo estén de paso, seguro que de todas aprenderemos algo. Esa es mi filosofía^^
Un beso y bienvenido otra vez!^^
que bonita....yo quiero volver por 3 vez....porque alli tengo gente de esa que se queda para siempre.
Una gran filosofía Morland, no me cabe la menor duda (pensamos parecido en esto, jejejejeje). En la vida siempre hay que estar abierto a las nuevas posibilidades o experiencias, porque si no, te pierdes toda la emoción, jejejejeje.
Pues yo definitivamente tengo que volver, me queda mucho por visitar, así que quién sabe, puede que nos crucemos por sus calles.
Un besito
Holaaaaaaaaaaa
Te echaba de menos.
Me alegro de tu vuelta, y si siempre debemos estar con los ojos muy abiertos y estar muy atentos, alli donde vamos. Porque la fortuna social nos puede invadir aun sin darnos cuenta.
Besos querido amigo
Sí, y en ambos casos, casi siempre merece la pena.
Un beso vecino!
Sabes que yo a ti también S.
Me encanta eso de la fortuna social Anna, jejejeje, suena de maravilla.
Suele ser así Nadia.
Un besote y gracias por seguir visitándome
Yo también quierooooo
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