sábado, 2 de marzo de 2013

Dime de qué trabajas...

... y te diré si me gustas.

Desde hace un mes he vuelto a trabajar. Supongo que ya iba siendo hora de dejar de hacer le vago puesto que ya llevaba algo más de un año sin dar ni chapa.
Como decía he vuelto a trabajar, lo he hecho en una de las principales compañías de este país y además ocupando un puesto de responsabilidad cuyo nombre es de lo más rimbombante.

Con mi nuevo trabajo ha venido también un cambio de actitud por parte de mi entorno, en primer lugar, y de todo el que se entera en general, y es algo que no me gusta demasiado.

Cuando la gente me venía preguntando en qué trabajaba mi respuesta siempre era la misma, "en nada, a lo que me dedico es a pasar droga en la puerta de los colegios, que es algo que deja mucho margen", y ahora, pues la verdad es que lo sigo diciendo. Salvo que alguien me insista no suelo cortar la broma porque yo no soy el sitio en el que trabajo y no quiero ser juzgado por eso.

Resulta curioso, pero en Suecia era algo que pasaba (o pasa). Un sueco siempre te pregunta en qué trabajas nada más conocerte para así poder catalogarte. Pues ahora es algo que también sucede aquí.

Lo decía antes, y lo repito, YO NO SOY MI TRABAJO, tampoco soy el dinero que gano o el lugar donde vivo. No creo que nadie tenga el derecho de juzgarme, pero si se diera el caso quisiera que fuese por cómo soy no por todas esas otras cosas tan sumamente superficiales.

Supongo que será cosa de la crisis, o que occidente está girando hacia esto, pero me da mucha pena que la gente sea así.

Por mi parte... creo que "seguiré vendiendo droga a la puerta del colegio" o cualquier otra burrada que se me ocurra decir en el momento en el que me pregunten, y al que no le guste por ello, que siga su camino.

3 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Oscuro dijo...

Pues nada, siento que decidieses borrar tu comentario, pero yo lo leí, jejejejeje.

S. dijo...

¿En qué trabajas?
Jajajajajajajajajaj
A mi suelen preguntarme ¿y tú cuánto ganas?
Es triste porque la gente suele meterse en donde no le llaman.