sábado, 29 de mayo de 2010

Vivir deprisa y morir solo

"Desde hace una década vivimos en la cultura del aquí y ahora, en la que la urgencia domina nuestra vida. Pero ¿vivir así nos hace más felices o sólo oculta el miedo a pensar?
El consumismo se ha trasladado a las relaciones sentimentales, cada vez más efímeras, por no hablar de nuestra sufrida agenda diaria, que sobrecargamos de compromisos y actividades. Consumimos tiempo y recursos en una carrera alocada contra el ritmo natural de las cosas.

"Tanta urgencia tenemos por hacer cosas, que olvidamos lo único importante: vivir" (Robert Louis Stevenson)
Nos hemos acostumbrado a los resultados inmediatos y cualquier cosa que se dilate demasiado nos molesta.
Nuestra generación exige resultados a cortísimo plazo. Pero ¿vivir así nos hace más felices?¿Dónde está el placer de la espera?¿Qué sentido tiene correr tanto cuando no sabemos hacia dónde queremos ir?
Antiguamente la paciencia y la lentitud se consideraban virtudes capitales para hacer grandes obras. La precipitación, en cambio, genera estrés, angustia y frustración. Tal como decía hace un siglo el escritor Chesterton, el problema de las prisas es que al final nos hacen perder tiempo.

"Ha de haber algo más en la vida que tenerlo todo" (Maurice Sendak)
Corremos sin cesar porque no sabemos adónde vamos ni qué queremos hacer con nuestras vidas. Como detenernos a pensar nos da miedo- existe el riesgo de descubrir que andamos perdidos-, entre una cápsula de experiencia y la siguiente , seguimos a la carrera."

Por Francesc Miralles (extracto) EL PAÍS SEMANAL Domingo 23 de mayo de 2010

Al final, por mucho que corramos hay algo que está claro, jamás podremos escapar de nosotros mismos.

lunes, 24 de mayo de 2010

Canciones en el suburbano 2


Y otra vez me lo volví a encontrar, volvía a estar ahí, en mi línea de metro, tocando la guitarra y cantando con su voz desgarrada.

La primera vez me alegró el día, un día triste para mí. En esta ocasión, el mero hecho de verle me lo volvió a alegrar.

Es curioso, han pasado como seis meses, pero me sigo acordando como si fuese ayer. Me encantan esas pequeñas historias

sábado, 22 de mayo de 2010

Friedrich Nietzsche

- What does not destroy me, makes me stronger.

- The higher we soar, the smaller we appear to those who cannot fly

jueves, 20 de mayo de 2010

Te extraño


Dicen que uno siempre quiere aquello que no puede tener y no dudo que sea cierto, pero creo que este no es el caso, simplemente la echo de menos.

Porque he querido a muy poca gente en mi vida y el número de personas que me han querido a mí tal vez sea hasta más pequeño, por ello se me hace tan duro.

Cada día está presente en mis pensamientos.

Te extraño

lunes, 17 de mayo de 2010

Señor, ¿puede decirme la hora?


¡Menuda frase! resulta realmente lapidaria.

El otro día, mientras esperaba en el portal a que bajase un amigo, un chico, no debía tener más de 12 años, me la dijo. A estas alturas de la película no es algo que me sorprenda porque uno ya tiene su edad, pero me puse a recordar cuando la escuché por primera vez...

No debía tener más de 17 años cuando un niño me la soltó, así, a bocajarro. Yo, por supuesto, no me lo esperaba y aquella frase cayó sobre mí como un jarro de agua fría. De pronto ya no era un "tío, tronco, chaval, colega" o cualquier variante, no, ya era "señor" ¡joder, pero si yo ayer era un niño! ¿qué ha ocurrido aquí?

Ya han pasado un par de primaveras desde entonces y ahora esa frase no tiene la misma transcendencia, es más, hasta se agradece vista la generación de Ni-Nis que tenemos, que no conocen lo que es el respeto por los demás, pero aún así no pude evitar sentir un ligero cosquilleo en el estómago y recordar que yo también fui joven una vez.

viernes, 14 de mayo de 2010

Las mujeres y la soledad


Hoy me paré a pensar en ello y llegué a una interesante conclusión, no conozco ni a una mujer soltera (esto no es del todo cierto, porque conozco a una, una amiga, pero ella es la excepción que confirma la regla).

Estos días en mi viaje he tenido la oportunidad de conocer a unas cuantas chicas y todas tenían novio. Todas las chicas que conozco en España están casadas o tienen pareja, novio o similar.

En cambio si hago esta misma reflexión por mi entorno masculino la cosa cambia, si bien tengo amigos emparejados un buen número de ellos está solo.

¿Qué es lo que ocurre aquí?¿cómo es esto posible? Cuando yo era pequeño (y ojo, esto lo recuerdo perfectamente) mi madre me decía que había siete chicas por cada chico, pues yo quiero mis siete chicas y las quiero ahora, ¿dónde están?

En fin, no sé qué ocurre...

jueves, 13 de mayo de 2010

Regresé


Aquí estoy de nuevo, ni siquiera la nube de ceniza que ha cubierto España estos días ha conseguido impedir que regresase, aunque eso sí, logró retrasar mi vuelta un poco.

El caso es que como siempre he tenido mucho tiempo para pensar y he llegado a una conclusión interesante. Gracias a que hace ya bastante que aprendí a acallar mi mente creo que no me he vuelto loco, jejejejejeje, para alguien que pasa tanto tiempo solo como yo eso es algo indispensable.

Cuando uno está solo tiene a pensar, muchas veces demasiado, sobre las cosas que ha hecho, la gente que ha pasado por su vida y todas esas cosas. Hacerlo un poco es productivo, conviene reflexionar de vez en cuando sobre esos asuntos, pero lo malo es comerse la cabeza y de ahí a empezar a hablar solo sólo hay un paso, jejejejeje.

Pues eso, me gusta esta faceta de mí, poder silenciar mis pensamientos y simplemente disfrutar del momento.

Es un placer volver a estar por aquí

jueves, 6 de mayo de 2010

La cura para el hastío...



Es irse de viaje, jejejejejejeje, así que a ello voy.

Me marcho unos días a Alemanía, hay que hacer turismo por tierras germanas y de paso visitar una buena amiga que vive por allí (más bien es al revés, voy a visitarla a ella que tengo muchas ganas de verla y de paso algo de turismo haremos).

Así que nada, cuidarme esto un poquito que la semana que viene cuando vuelva lo quiero ver como la patena, jejejejeje.

lunes, 3 de mayo de 2010

Hastío


Ese es mi estado de ánimo actual.

Me apetece poco o nada hacer... nada, jejejejejeje. Esto es un desastre, jejejejejeje.

Creo que viene un poco con la primavera, los cambios de estación siempre me provocan cierto bajón tanto anímico como físico, además creo que es algo heredado. Recuerdo que mi abuelo, al llegar estas fechas, siempre se compraba una caja en el herbolario de gin-sen y jalea real, porque también le daba cierto bajón.

Así estamos, con poquitas ganas de hacer nada, pero en esto, como en casi todo en la vida, un día te levantas y todo ha cambiado, jejejejejejeje.

Seguro que mañana será otro día.